Unas horas en Yellowstone y Gran Teton Park


Un día de invierno, en la localidad de Jackson, en el estado de Wyoming (EE.UU.), en medio de las Rocky Mountains, decidimos hacer una visita al Parque, ya que se encuentra a unos 80 km de esta localidad.
Debido a las bajas temperaturas y el espesor de nieve, no era posible el acceso por la entrada Sur, que es la natural desde Jackson, teniendo que hacer entonces, una vuelta de casi 500 kilómetros hasta la localidad de Gardiner en el estado de Montana, donde el acceso al parque si era posible. Nos acompañaba de guía e interprete Ángel Rodríguez (www.anrodphoto.com), conocedor y visitante frecuente de estos parajes. Al amanecer y con temperaturas de -20 grados, el paisaje nevando y con visibilidad reducida, la estancia fue de lo más invernal. Las neblinas, los tonos grises y el silencio abismal, daban la sensación de encontrarnos en una glaciación.
La imagen de los Bisontes con el pelaje cubierto de nieve y hielo, los hacía aún más salvajes recordando aquel mito del lejano Oeste.


A lo largo del día, el tiempo mejoró y al dejar de nevar, pudimos incluso hacer alguna caminata. Eso sí, enterrados hasta la cintura. Durante estas horas mágicas, vimos además de los Bisontes, un lobo gris tumbado en la nieve entre la ventisca, el coyote, el águila calva, la Antilocapra americana,
ciervos y carneros.
También pudimos recoger imágenes de los paisajes desolados por el incendio del año 1988 que quemó 800.000 ha, la cantidad de bosque que se quema en España en una década, viendo eso si, como poco a poco se va recuperando. Visitar Yellowstone durante esta época del año, suponía que nos quedábamos sin ver uno de los protagonistas de la fauna del Parque: el Oso Yogui, que estaba durmiendo su noche invernal, pero observar la realidad más dura de la época invernal, fue una gran experiencia.